Romana

El Colegio Montealto fue puesto en marcha en 1993 por un grupo familias que anhelaban un centro educativo para sus hijas en el que, con una visión cristiana de la vida, se les proporcionase una formación completa y personalizada que abarcase no solo el ámbito científico y técnico, sino también el espiritual y humano. Mons. Álvaro del Portillo acompañó en sus primeros pasos al Colegio Montealto. Cuando falleció, los miembros del grupo promotor —sabedores de su fama de santidad— acudieron a la intercesión de don Álvaro para pedirle que se inscribieran más alumnas: poco tiempo después se sumó un buen número de estudiantes y se consiguió un volumen que asegura la sostenibilidad.