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En toda Italia

En el último trimestre del año, la proximidad del centenario del Fundador del Opus Dei ha motivado, en varios lugares de Italia, actos de diverso tipo que han tenido como denominador común las enseñanzas del Beato Josemaría.


El 25 de noviembre se celebró en el Colegio Universitario Viscontea de Milán la ceremonia de apertura del Año Académico 2001-2002. El tema del encuentro, “La centralidad de la persona en las enseñanzas del Beato Josemaría Escrivá”, fue tratado desde diversas perspectivas e ilustrado con la proyección de algunos fragmentos de una reunión de catequesis del Fundador del Opus Dei en Barcelona, en 1972, con profesores y alumnos de una escuela de Economía.

En su breve intervención introductoria, la escritora Marta Brancatisano expuso las diferentes iniciativas que se están desarrollando en todo el mundo con motivo del centenario del nacimiento del Beato Josemaría Escrivá. Mencionó, entre otras, una emisión de sellos conmemorativos por parte del Estado italiano.

Marco Vigorelli, senior partner de una conocida sociedad consultora, recordó que el Beato Josemaría Escrivá deseaba, ya en el año 1931, que los catecismos tuviesen una parte dedicada a la Doctrina social de la Iglesia, de manera que desde niño el cristiano conociera sus obligaciones sociales y de justicia. Examinó también varias definiciones de globalización y de empresa a la luz de las concepciones que ponen al hombre al servicio de la economía y las que ponen a la economía al servicio del hombre: “el hombre egocéntrico, en la búsqueda de intereses individuales, crea exclusión y desigualdad y pone al hombre al servicio de la economía”, sería el esquema social de las primeras; “el hombre justo, en la búsqueda del bien común, crea compromiso y solidaridad y pone la economía al servicio del hombre”, sería el de las más sensibles a la dignidad humana.

Giuseppe de Lucia Lumeno, Administrador Delegado de una sociedad, centró su intervención en la figura del Fundador del Opus Dei y su doctrina de la santificación del trabajo. Subrayó el hecho de que el mensaje recibido por Josemaría Escrivá el 2 de octubre de 1928 era un mensaje divino que debía superar la contingencia histórica. De Lucia consideró que el Fundador había comenzado a hablar de santificación del trabajo en la época de la gran recesión del 29, y concluía que si se hubiese tratado sólo de una buena idea, fruto de la imaginación de un hombre, difícilmente habría sobrevivido a los problemas de la gran crisis que afligió durante tantos años, hasta 1946, a la economía mundial y al mundo del trabajo. Después de examinar las encíclicas sociales de Juan Pablo II y confrontarlas con algunas expresiones clásicas de las enseñanzas de Josemaría Escrivá —”santificar el trabajo, santificarse con el trabajo, santificar a los demás con el trabajo”—, De Lucia concluyó afirmando que el “núcleo de aquello que Dios hizo ver a Escrivá el 2 de octubre de 1928 es el carácter de corredención del trabajo ordinario: de esta manera el trabajo convierte a los cristianos, no de forma alegórica sino real, en alter Christus, ipse Christus, esto es, en corredentores con Cristo”.


El 24 de noviembre tuvo lugar en la Residencia delle Peschiere de Génova una mesa redonda sobre la solidaridad y el voluntariado en las enseñanzas del Beato Josemaría. Participaron Umberto Farri, fundador y presidente del Istituto per la Cooperazione Universitaria, y Alberto Michelini, diputado en el Parlamento italiano y periodista. Piero Micossi, Asesor regional de la Sanidad, fue el moderador.

Umberto Farri hizo un breve repaso de las etapas más destacadas de la ONG que preside, a la que dio inicio en 1967, en un momento de agitación en el mundo universitario, movido por las enseñanzas del Beato Josemaría sobre la responsabilidad de los cristianos en la construcción de un orden social justo, y concretamente, del papel de la universidad en esta tarea.

En su intervención, Alberto Michelini habló de un documental que ha realizado para el centenario del nacimiento del Beato Josemaría. El vídeo contiene una serie de testimonios, provenientes de todo el mundo, de personas de todas las clases sociales —desde un carnicero de Hong Kong hasta un hombre de negocios de Nueva York— que, en palabras de Michelini, “siguiendo el espíritu del Opus Dei se esfuerzan —según una conocida expresión del Beato Josemaría— por ‘transformar en endecasílabos la vida cotidiana’, santificando el propio trabajo y contribuyendo a crear un ambiente de serenidad y de amistad que puede de verdad cambiar la faz de la Tierra”.

La jornada concluyó con algunos testimonios de jóvenes que han participado, en el curso de los años, en las actividades de voluntariado promovidas por la Residencia tanto en la misma ciudad de Génova como en diversas partes del mundo.


El 17 de noviembre, organizado por la Asociación AEC, un ente moral de derecho regional, tuvo lugar en Turín el Convenio “Amar al mundo apasionadamente”, al que han asistido más de 400 personas. Fue inaugurado con una conferencia a cargo de Hernán Fitte, profesor de Teología moral en la Pontificia Universidad de la Santa Cruz.

El convenio concluyó con una mesa redonda que moderó Gianluca Segre, presidente del AEC, y en la que intervinieron Sergio Benedetto, de la Universidad de Turín, que habló de la enseñanza como servicio; Anna Maria Minetti, dirigente de empresa, que afrontó el tema del trabajo de la mujer y su papel en la sociedad en las enseñanzas del Beato Josemaría; y Marco Vigorelli, exponente de una sociedad auditora, que hizo algunos comentarios sobre la relación trabajo-familia, enriquecidos con muchos e interesantes ejemplos sacados de su propia experiencia de empresario con un trabajo muy absorbente y padre de familia numerosa.


El 13 de octubre se celebró en el Teatro de la Reggia de Nápoles un convenio titulado “El Beato Josemaría y la doctrina social de la Iglesia. Experiencias de promoción humana y social en el mundo”. Intervinieron, entre otros, el Arzobispo de Nápoles, cardenal Michele Giordano, el ministro de industria y comercio, Antonio Marzano, el empresario Cesare Romiti y Roberto Panizza, profesor de Economía Internacional en la Universidad de Turín.

El convenio comenzó con una breve presentación de Luigi Cuccurullo, presidente del IPE (Istituto per Ricerche ed attività educative), entidad organizadora del acto, y una conferencia del profesor Ángel Rodríguez Luño, profesor Ordinario de Teología moral de la Pontificia Universidad de la Santa Cruz, sobre las enseñanzas del Beato Josemaría Escrivá acerca de la formación de la conciencia en materia social y política.

Tuvo lugar a continuación una mesa redonda, moderada por el periodista Giovanni Minoli, en la que intervinieron representantes de diversas iniciativas promovidas por fieles del Opus Dei en países tan variados como Congo, Filipinas, Perú e Italia.


La Universidad Campus Biomédico organizó un simposio sobre el significado del dolor en las enseñanzas del Beato Josemaría. Tuvo lugar en la sala de congresos del Centro Nacional de Investigaciones (CNR) el 9 de noviembre y participaron más de 500 personas.

Tras el saludo del Rector, Vincenzo Lorenzelli, varios profesores de distintas universidades romanas y representantes de las autoridades sanitarias intercambiaron experiencias y comentarios en una mesa redonda que moderó el periodista Fabrizio del Noce y que abrió la profesora Paola Binetti con unas reflexiones sobre la perspectiva humana y sobrenatural con que el Beato Josemaría afrontaba la cuestión del sufrimiento. El subsecretario del Ministerio de la Sanidad, Antonio Guidi, el profesor Francesco d’Agostino y el asesor regional de Sanidad de Liguria, Piero Micossi, fueron algunos de los participantes en la mesa redonda.

El acto prosiguió por la tarde con algunos testimonios personales de estudiantes de la Universidad Campus Biomédico sobre el contacto con el sufrimiento. Otro testimonio emotivo fue el de Antonio Ricciardi, director de un curso de gestión sanitaria que el Campus Biomédico ha puesto en marcha en colaboración con el Politécnico de Milán: en un diagnóstico prenatal, le fue comunicado que su sexta hija sufría una grave enfermedad; gracias a la fe, al apoyo y la oración de muchos amigos, y a la ciencia médica, superó la angustia que esas previsiones le habían producido. La pequeña Maria, de pocos meses, fue llevada por su madre al estrado y se ganó el aplauso más largo de la jornada.


Del 9 al 11 de noviembre se desarrolló en el Centro Internacional Calarossa, en Sicilia, una reunión dirigida a profesores universitarios que tuvo por tema “Trabajo y santidad en las enseñanzas del Beato Josemaría Escrivá”. Participaron un centenar de personas. El día 9 intervinieron los profesores Giorgio Faro, de la Universidad Pontificia de la Santa Cruz (Roma), y Franco Poterzio, de la Universidad de Milán. Al día siguiente, en la relación final, el profesor José Luis Illanes, de la Universidad de Navarra (Pamplona), se apoyó en varias frases del Beato Josemaría para mostrar que “el trabajo es una realidad exclusivamente y típicamente humana” y que “no es un castigo, sino un don de Dios”, con quien el hombre puede estar en constante diálogo en medio de las ocupaciones ordinarias.

Romana, n. 33, Julio-Diciembre 2001, p. 205-208.

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