Romana

El viernes 28 de junio por la tarde, el prelado del Opus Dei llegó a Milán. Al día siguiente, solemnidad de San Pedro y San Pablo, celebró por la mañana la Santa Misa en el centro que alberga la Asesoría Regional del Opus Dei en Italia, y algo más tarde se desplazó a la sede milanesa de las escuelas FAES, donde tuvo un animado encuentro con las familias, los directivos, los docentes y el personal de servicios de esa red italiana de escuelas que precisamente este año celebra sus cincuenta años de vida.

En conjunto, un millar de personas participaron en el encuentro, que duró poco menos de una hora y en el que el prelado, dialogando con quienes sucesivamente tomaron la palabra, habló de la fe, del valor de las cosas pequeñas, de la centralidad de los padres en la tarea de la escuela, del servicio a los demás, de la felicidad, de las pruebas dolorosas que en algún momento toda persona experimenta, etc.

Al término del encuentro, monseñor Fernando Ocáriz impartió su bendición a los presentes. Poco después abandonó Milán en dirección a España, donde iba a pasar unos días.