Romana

El historiador Andrés Vázquez de Prada ha publicado el segundo volumen de “El Fundador del Opus Dei”, la biografía más amplia sobre Josemaría Escrivá. Este segundo tomo —de un proyecto de tres— abarca desde 1936 a 1946.

El libro reconstruye la vida de San Josemaría con base en documentos, testimonios, cartas y notas de archivo. La etapa biográfica que contempla queda marcada por los primeros pasos del Opus Dei, tras ser fundado por inspiración divina en 1928.

Son años de intenso trabajo y de sufrimiento para Josemaría Escrivá y los primeros hombres y mujeres del Opus Dei. A las dificultades vividas durante la guerra civil española (1936-1939) se sucede la expansión por diversas ciudades. El biógrafo plasma el empeño de san Josemaría por transmitir con fidelidad el espíritu que había recibido de Dios.

Vázquez de Prada recoge numerosas citas de escritos del santo, en los que se refleja su lucha interior y su búsqueda constante de la identificación con la voluntad de Dios. Destaca en especial el uso que hace el autor del amplio epistolario de San Josemaría. En las cartas se revela la inquietud sacerdotal de su alma llena de amor a la Iglesia.

La vida interior: hilo conductor de su biografía

El autor trata de adentrarse en el personaje para descubrir las razones profundas de su proceder. De hecho, el hilo conductor de la biografía se encuentra en la vida de oración de San Josemaría y en el apostolado, como proyección hacia los demás del amor de Dios.

Esto queda especialmente patente en los capítulos dedicados a la guerra civil, donde Vázquez de Prada quiere mostrar que San Josemaría entendió y vivió los tiempos de la contienda como ocasión de purificación y de prueba espiritual y acentuó el espíritu de expiación y desagravio ante Dios por los pecados y ofensas cometidas. No hay en sus palabras y en sus escritos mención a batallas, campañas, victorias u otras circunstancias bélicas. Sí aparecen otras consideraciones de naturaleza espiritual y sacerdotal, especialmente rogando por la paz, el perdón y la reconciliación.

Como punto importante de estos años para el posterior desarrollo del Opus Dei destaca el trabajo apostólico con mujeres, que por aquel entonces cobró un especial impulso.